Miquel Codina
Director de la Biblioteca Rector Gabriel Ferraté
Servicio de Bibliotecas y Documentación de la Universitat Politècnica de Catalunya
Araceli Hilaria Muñoz
Unidad de Servicios para el Aprendizaje de la Biblioteca Rector Gabriel Ferraté
Servicio de Bibliotecas y Documentación de la Universitat Politècnica de Catalunya
Resumen [Abstract] [Resum]
En un contexto de fuerte crisis económica y medioambiental, la Biblioteca Rector Gabriel Ferraté (BRGF), de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC), ha conseguido un ahorro en energía eléctrica superior al 33 % a pesar de producirse en un momento en el que la biblioteca ha ampliado significativamente sus prestaciones.
Detallar las acciones del plan interno que ha determinado este ahorro es el objetivo principal de este artículo, pero además también se pretende dar a conocer las colaboraciones y gastos que han sido necesarios para ello, cuáles han sido las limitaciones impuestas a tales acciones o cual es el futuro esperado en este campo en la BRGF y en las bibliotecas de la UPC. Todo esto, con la voluntad de poner de manifiesto la importancia de un tema tan inédito en la bibliografía dedicada a las bibliotecas y, sobre todo, con el ánimo de que alguna(s) de estas acciones puedan ser útiles y aplicables a otras bibliotecas tanto universitarias como de cualquier otro ámbito.
1 Introducción
Por todos es conocido el contexto energético actual y su influencia en el cambio climático y el medioambiente, así como la situación económica que vivimos. Por tanto, se trata de una oportunidad para poner en marcha estrategias de mejora de eficiencia energética. En este marco general, la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC), como el resto de universidades públicas catalanas, presenta una delicada situación económica que trata de mejorar promoviendo, entre otras, políticas de ahorro y eficiencia energética. Estas cuentan con el valor añadido del componente pedagógico y divulgativo de una nueva cultura energética y medioambiental más respetuosa.
Desde hace un tiempo, la Biblioteca Rector Gabriel Ferraté (BRGF), como parte integrante de la UPC, está tratando de colaborar decididamente en la mejora de esta situación económica y muy especialmente en la optimización y el ahorro energético, con la convicción de que el consumo responsable y medido es básico para una buena gestión de los caudales públicos. Las acciones concretas orientadas a esta mejora se están produciendo además con una inversión económica mínima, en un momento en el que la biblioteca ha aumentado su oferta de servicios y los metros cuadrados que se destinan, y sin que representen un impacto negativo en la valoración que los estudiantes hacen de las condiciones climáticas y lumínicas del edifico.
Con la voluntad de que algunas de las actuaciones realizadas puedan ser útiles y aplicables a otras bibliotecas, este artículo pretende dar a conocer todo el conjunto de acciones que para el ahorro energético se han llevado y se llevan a término en la BRGF.
1.1 La BRGF: Características y emplazamiento
La BRGF es la biblioteca más grande de la UPC, con una superficie que supera los 6.600 m2, y el edifico con más usuarios de toda la universidad (durante el 2010 superó los 880.000 visitantes). Forma parte del conjunto de edificios del Campus Norte de la UPC y se encuentra ubicada en la parte alta de la Avenida Diagonal de Barcelona.
El edificio consta de 6 plantas —sin contar la cubierta—, distribuidas de la siguiente manera:
- Planta cubierta: no es de uso público. En ella se encuentran la maquinaria del aire acondicionado y los motores de los ascensores. Tiene unas oberturas vidriadas que permiten el paso de la luz natural a la sala de estudio de la planta 3.
- Planta 3: en esta tercera planta es donde se encuentra la sala de estudio más grande. También hay lavabos como en todas las plantas de uso público.
- Planta 2: esta segunda planta consta de una amplia sala de estudio y pequeñas salas de trabajo en grupo. Está muy bien iluminada de manera natural gracias a la fachada de vidrio que la limita.
- Planta 1: esta primera planta es prácticamente igual a la segunda.
- Planta 0: es la planta de acceso a la biblioteca. Aquí se encuentran la recepción y distintos servicios a los usuarios —la mayoría tecnológicos—, además de los departamentos de administración y dirección de la biblioteca. También cuenta con mucha luz natural.
- Planta -1: espacio donde se ubican aulas de estudio y de formación.
- Planta -2: este sótano no es de uso público y en él se encuentran el almacén y el archivo tanto de la biblioteca como de la UPC.
2 Acciones de ahorro y optimización del consumo energético en la BRGF
Estudios internos de gasto energético llevados a término por la UPC durante el 2009 mostraron que la BRGF se situaba como el cuarto edificio más consumidor del Campus Norte. Esta situación llevó a un grupo de estudiantes, participantes en el Worskhop "Consumint Barcelona", a desarrollar —con la colaboración del Instituto de Sostenibilidad de la UPC (IS.UPC), el Servicio de Mantenimiento de Coordinación del Campus Norte y la BRGF—, un proyecto de investigación que tenía el objetivo principal de elaborar propuestas para reducir las emisiones de CO2 en un 20 %.1
A partir de los resultados de este proyecto, las unidades organizativas implicadas diseñaron un plan interno de ahorro energético, llamado POE (Proyecto de Optimización Energética), con el objetivo genérico de mejorar la eficiencia energética del edificio.
El POE se planteó sobre estos tres apartados principales:
- Gestión de espacios y equipamientos
- Reducción del consumo en climatización
- Reducción del consumo en iluminación
Y se determinaron como condiciones para cualquier actuación que la inversión económica fuese mínima y que cualquier actuación no afectase negativamente a la calidad del servicio a los usuarios finales de la biblioteca.
A continuación se describen las acciones previstas —muchas de ellas ya realizadas a día de hoy— en el POE ordenadas según los apartados mencionados anteriormente.
2.1 Gestión de espacios y equipamientos
Este conjunto de acciones se basa en ajustar la oferta de espacios y equipamientos de la biblioteca a las necesidades reales de los usuarios.
2.1.1 Gestión de espacios en función de la ocupación
Se trata de adaptar la oferta de espacios abiertos a los usuarios a la ocupación real para influir sobre la reducción del consumo de fondo.2 Antes de iniciar el POE, la biblioteca abría todos los espacios durante todo el año con el consiguiente elevado consumo en climatización e iluminación, pero las estadísticas de ocupación demuestran como la ocupación de las bibliotecas universitarias registra valores mínimos en períodos en los cuales no hay actividad lectiva y no están cerca de las fechas de exámenes. Combinando el calendario académico de la universidad con las fechas de ocupación de la biblioteca, la BRGF planifica los períodos en los cuales la biblioteca reduce sus dimensiones, cerrando plantas en función de la demanda prevista.
Teniendo en cuenta que se pueden apagar las luces y la climatización por sectores, el gasto en estos conceptos se minimiza en los espacios cerrados y, como consecuencia, esta medida es la que está generando un mayor ahorro energético en la BRGF.
2.1.2 Funcionamiento de los ascensores en función del número de usuarios
La BRGF dispone de dos ascensores de uso público que funcionan simultáneamente. Siguiendo el mismo calendario de ahorro mencionado en el punto anterior, esta acción prevé que, en épocas de mínima afluencia, se desconecte totalmente uno de los ascensores de la alimentación eléctrica.
En todo caso, hay que matizar que para la BRGF esta es una buena medida de ahorro energético sólo en el caso de que el período de aplicación sea suficientemente amplio —mínimo un mes— y siempre y cuando se pueda asegurar la puesta en marcha del otro ascensor de manera inmediata si se produce alguna incidencia en el único ascensor en funcionamiento. Si no se cumplen estas condiciones pensamos que los inconvenientes para los usuarios no compensan la ganancia generada por la acción.
2.1.3 Gestión de equipamientos en función de la ocupación
La biblioteca ofrece a los usuarios un total de 47 ordenadores de sobremesa para diversos usos —desde consulta del catálogo hasta videoconferencia mediante Skype—. Si no se controla, es fácil que los equipos estén continuamente en funcionamiento, aunque en determinados momentos no haya nadie utilizándolos, simplemente porque los usuarios los encienden pero no los apagan cuando ya han acabado de usarlos.
Esta medida prevé que, dependiendo de la afluencia de usuarios, el personal de la BRGF mantenga el parque informático apagado excepto el necesario según la ocupación de la biblioteca. De este modo, el número de ordenadores conectados, y por consiguiente produciendo un consumo eléctrico, varía dependiendo del día y la hora y el gasto energético de estos equipos es sólo el que se necesita puntualmente.
Asimismo, también se apagan completamente todos los ordenadores y pantallas del personal de la biblioteca cuando no se usan. Se evita de esta manera el gasto que supone tener estos equipos en modo de espera (stand by) que, como se sabe, puede influir significativamente en el consumo eléctrico.3
2.1.4 Software Granola para el ahorro energético en los equipos de la UPC
En noviembre de 2010 la BRGF entró en una prueba piloto de ahorro energético en ordenadores consistente en la instalación de un software de ahorro energético en las estaciones de trabajo en la UPC. El software en cuestión, Granola, regula la velocidad y el consumo de la CPU en tiempo real sin interferir con otras aplicaciones ni empeorar la percepción del rendimiento de la máquina. En octubre de 2011 se ha podido evaluar que el ahorro energético conseguido en los 20 ordenadores del personal de la BRGF donde se instaló supera el 38 % de su anterior consumo habitual.
2.2 Reducción del consumo en climatización
Los gastos por consumo eléctrico en climatización suponen casi la mitad del total de los gastos en energía eléctrica de la biblioteca, de aquí la importancia de intentar reducir este consumo.
2.2.1 Reducción del consumo de fondo del aire acondicionado
Se trata de reducir el consumo de fondo mediante el ajuste de los periodos de encendido y apagado de la maquinaria del clima. Para poder llevar a cabo esta acción, se utiliza el calendario mencionado en el apartado 2.1.1. Gestión de espacios en función de la ocupación (que recoge el horario de apertura de la biblioteca día a día y planta a planta) para programar los automatismos que regulan el encendido de las máquinas de climatización ajustándolos a los horarios más restrictivos posibles —p. ej., en horario regular, la biblioteca abre a las 9 h y el sistema está programado para encender los aparatos a la misma hora y cuando se cierra, a las 21 h, el sistema está programado para apagarse 30 minutos antes, dado que la temperatura conseguida durante todo el día no se ve demasiado afectada en esta última media hora como consecuencia de la inercia térmica—.
2.2.2 Reducción del consumo del aire acondicionado en las salas de trabajo en grupo
La biblioteca cuenta con 13 salas de trabajo en grupo repartidas entre las plantas 1 y 2. Estas salas cuentan con un sistema de climatización individual para cada una —independiente del sistema general de climatización del resto del edificio— y su puesta en funcionamiento es manual. La medida adoptada en este caso prevé que el personal de la biblioteca encienda o apague el aire de cada una de las salas siguiendo temperaturas de consigna4 y según las necesidades mínimas de confort. De este modo, el aire acondicionado de las salas de trabajo en grupo permanece apagado cuando la planta se encuentra cerrada a los usuarios o no es necesario su uso.
2.3 Ajuste y optimización de la temperatura de consigna
Desde su inauguración, la BRGF tenía constancia que, a pesar del gran gasto en climatización, el grado de confort en los espacios destinados a los usuarios y al personal no era el adecuado. Para mejorar la confortabilidad se hizo un estudio en profundidad del sistema de climatización con la intención de detectar las divergencias entre lo que se le pide al sistema (temperatura de consigna) y la temperatura real en las salas. Para facilitar este estudio se instaló una red de seguimiento DEXserver —varios sensores repartidos por las diversas salas dan lecturas en tiempo real de temperatura, humedad y luminosidad—. Los datos obtenidos se transfieren a un sistema centralizado y pueden ser consultadas al momento vía web (v. Figura 1).
Figura 1. Presentación de los datos de temperatura que ofrece la red DEXserver
El estudio corroboró que, por el calor que generan las personas, la afluencia de usuarios es un parámetro tanto o más importante que la temperatura exterior y a partir de aquí se decidió ajustar las temperaturas de consigna de forma diferenciada por temporada, planta y situación dentro de la planta. El sistema de seguimiento de la red DEXserver facilita el trabajo de la toma de decisiones en cuanto a las temperaturas de consigna óptimas, más cercanas a las necesidades reales para sentir confort y con menos gasto energético.
Complementariamente, se hizo un estudio en profundidad del sistema de climatización de las salas de trabajo en grupo a partir del cual se redactaron unas instrucciones de uso eficiente de este sistema. Siguiendo estas instrucciones de uso, se quiere asegurar que mediante la optimización de la temperatura de consigna se consiga una mejora en el confort a la vez que un ahorro energético significativo.
2.2.4 Gestión solar mediante láminas y arbolado
La BRGF está ubicada en un edificio que se caracteriza por sus grandes fachadas de vidrio. Este hecho, que desde el punto de vista estético y de provisión de luz natural aporta ventajas, provoca importantes aumentos de la temperatura interior hasta niveles más allá de los aconsejables. Las ganancias térmicas originadas por la transparencia de las fachadas se han reducido de dos maneras diferentes:
- se han instalado láminas exteriores de protección solar para reducir las ganancias solares en la parte más expuesta de la fachada sudeste y que, además, protegen de la radiación ultravioleta. Estas láminas sustituyen las cortinas interiores que había instaladas consiguiendo una mejor protección y recuperando a la vez la visibilidad del exterior desde las salas.
- se han plantado árboles de hoja perenne en el exterior de la misma zona para proyectar sombra sobre la fachada y reducir el sobrecalentamiento de la fachada vidriada este y el exceso de radiación solar incidente. Con esta actuación se consigue también mejorar visualmente los accesos exteriores al edificio —con el hormigón como único material utilizado— y mejorar las vistas desde el interior, igual que en el caso de las láminas solares.
2.3 Reducción del consumo en iluminación
Tradicionalmente la BRGF ha mantenido las luces encendidas, de manera automática, desde la entrada de buena mañana de los servicios de limpieza hasta después del cierre de las instalaciones a los usuarios. El POE incluyó un estudio sobre las necesidades reales de iluminación en los diferentes espacios y concluyó que había que reducir el consumo de iluminación actuando de manera diferente en cada uno de ellos. A continuación se describen las medidas adoptadas en esta línea así como otras que, sin diferenciar espacios, sirven para toda la biblioteca.
2.3.1 Reducción del consumo de fondo del alumbrado general
La iluminación de la biblioteca, al igual que la climatización, está gobernada por automatismos que funcionan mediante temporizadores. El consumo de fondo del alumbrado se redujo del mismo modo que el consumo de fondo en climatización, o sea estableciendo un calendario con los horarios más restrictivos posibles para cada día y cada planta —hay que tener en cuenta que por ejemplo en época de exámenes la biblioteca abre sólo algunas de sus plantas hasta las 2:30 h de la noche— prefijando así las horas de su funcionamiento. Teniendo en cuenta que antes de la aplicación del POE las luces quedaban encendidas aunque no hubiera usuarios en las salas, el consumo de fondo era altísimo, por lo tanto, la reducción en este apartado ha sido muy considerable.
2.3.2 Reducción del consumo en el almacén
El almacén de la biblioteca es un espacio de uso interno y esporádico. El tránsito por sus mil metros cuadrados de superficie no es homogéneo y además el tiempo de estancia es muy variable, según los usos. Para dar respuesta a las diferentes casuísticas se diseñó un sistema de iluminación múltiple según las diferentes zonas:
- sistema automático por detectores de presencia5 en el pasillo central que atraviesa el almacén y sirve de camino hacia las diferentes áreas.
- sistema de encendido manual mediante pulsadores y apagado automático con temporizadores —se apagan pasados unos minutos— en las diferentes calles que dan acceso a las estanterías.
- sistema de encendido/apagado manual mediante interruptores en la zona donde no se va mucho pero, al mismo tiempo, cuando se trabaja, las tareas que se realizan implican mucho tiempo de estancia en este espacio.
2.3.3 Reducción del consumo en las plantas por el aprovechamiento de la luz natural
Las luces de las plantas 1 y 2 de la biblioteca se encendían durante todo el día sin tener en cuenta que se podía aprovechar la luz natural filtrada por los amplios ventanales de las fachadas. El POE ha implicado que las líneas que proporcionan electricidad a los focos y fluorescentes instalados alrededor de las plantas —y por lo tanto cerca de los ventanales— funcionen mediante el sensor de luminosidad general del Campus Norte, con lo cual estas luces sólo se encienden cuando realmente la luz natural es insuficiente —a partir del atardecer o los días nublados cuando no hay suficiente claridad, a cualquier hora del día—.
Actualmente está pendiente una actuación similar en la planta 3, en la cual las aperturas vidriadas de la planta cubierta permiten el paso de la luz natural a la sala de estudio, dando suficiente claridad como para poder prescindir de la luz artificial a menudo. Pero aquí, no se pueden conectar las diversas líneas de la sala en el mismo aparato que regula las plantas 1 y 2, porque la luminosidad específica del espacio pide un nuevo sensor que dé la orden de encendido antes que el de luminosidad general del Campus Norte. Aun así, la instalación de este nuevo equipamiento se verá pronto compensada dado que se podrá prescindir de la luz artificial de toda una planta durante muchas horas al día y esto supondrá un importante ahorro energético.
2.3.4 Reducción del consumo en la iluminación de los ascensores
De manera similar a lo que se ha hecho en otros lugares de la BRGF, también en los ascensores se ha instalado un nuevo sistema de iluminación por detección de presencia que permite que las luces interiores permanezcan apagadas cuando no se encuentran en uso y que se enciendan sólo a la entrada de las personas, con el consiguiente ahorro energético.
Además, y complementando las medidas sobre la iluminación de los ascensores, se ha actuado sobre el ascensor de uso interno que funciona sólo desde la planta 0 hasta las plantas -1 y -2. Antes de la aplicación del POE, este equipamiento tenía un sistema de funcionamiento que lo hacía volver de manera automática a la planta 0 pasados unos segundos de su parada a las plantas -1 o -2. Se ha corregido este sistema dejando el ascensor en la planta donde se solicita hasta nueva orden, reduciendo su funcionamiento —subida/bajada— a casi la mitad de su uso.
2.3.5 Reducción del consumo general por un cambio progresivo a LEDS
Se han empezado a instalar LEDs, de manera progresiva, en aquellos lugares donde la necesidad de iluminación sea fija y constante. Cómo se sabe, el gasto energético de los LEDs es muy inferior a la del resto de sistemas de alumbrado, manteniendo un nivel de iluminación similar.
3 Evolución del consumo energético en la BRGF: análisis y evaluación de los resultados
La BRGF, como otros edificios de la UPC, tiene instalado el SIRENA, un sistema propio de información de recursos energéticos y agua. Este sistema permite, mediante seguidores de consumo en línea, tomar datos en tiempo real sobre el consumo eléctrico. Además, como ya se ha mencionado, la red DEXserver informa sobre temperaturas, humedad y luminosidad. Mediante la comparativa de la información de los sistemas DEXserver y SIRENA se obtienen datos que facilitan la objetividad de la percepción del confort interior, a la vez que la posible reducción en el consumo energético.
Estas herramientas nos permiten ofrecer una comparativa entre el consumo energético de la biblioteca a partir de la puesta en marcha del POE (en mayo de 2010) y la media de los consumos de los tres años inmediatamente anteriores a los comienzos de las actuaciones (2007, 2008 y 2009), de cara a evaluar si las medidas descritas han supuesto un ahorro real durante este periodo.
La Figura 2 muestra la evolución del consumo energético en la BRGF siguiendo los parámetros mencionados en el párrafo anterior. Se observa claramente como desde mayo de 2010 —punto (1>), cuando se inició el primer paquete de acciones para el ahorro energético—, el consumo empezó a disminuir según se iban implementando las medidas contempladas en el POE. El punto (2>) marca un periodo de seguimiento estricto del sistema de climatización. Se puede observar como el segmento azul de este punto es muy largo —es decir, de mucho ahorro—, equiparable a los naranjas de julio y agosto del punto (3>), que marca el periodo donde se produjeron las acciones dedicadas a la gestión de espacios, con el cierre de dos de las plantas y que es lo que proporciona un mayor ahorro.6
Figura 2. Evolución del consumo en energía eléctrica en la BRGF
Además, los datos demuestran que los gastos continúan disminuyendo progresivamente, de forma que el ahorro energético acumulado de mayo de 2010 a octubre de 2011, respecto de la media de los tres años anteriores (2007–2009), llega hasta 296.217 kWh, como muestra la Figura 3.
Figura 3. Evolución del ahorro energético en kWh/mes y acumulativo
Traducido en dinero, este ahorro energético —y de CO2— representa un ahorro económico de aproximadamente 31.695 €, entre mayo de 2010 y octubre de 2011, y respecto a las cifras de los tres años anteriores.
Además, es importante remarcar que según las acciones que se van implementando y de las que se asegura su continuidad en el tiempo, el ahorro es cada vez mayor y el consumo eléctrico se estabiliza a la baja. Así, sólo entre abril y octubre de 2011, el ahorro acumulado ha superado los 18.000 €, o dicho de otro modo, se ha producido un ahorro que supera el 33 % —valor muy por encima del 20 % prefijado originalmente como objetivo—.
Finalmente, el porcentaje en la reducción del consumo de energía adquiere un valor añadido si se conocen las reformas en el edificio de la biblioteca durante agosto de 2010 y que supusieron la ampliación de la superficie utilizada y, por consiguiente, la ampliación de la superficie a climatizar e iluminar. Además, la afluencia de usuarios y el número de horas de apertura han sido superiores a los anteriores años y, esto nos contenta especialmente, en las encuestas de satisfacción llevadas a cabo durante el 2011, los estudiantes puntúan con mejor nota el grado de confort en climatización conseguido en la BRGF.
4 Futuro de la gestión energética en les bibliotecas de la UPC
Durante el 2011, la UPC ha puesto en marcha un Plan de ahorro energético muy amplio con el objetivo de reducir el consumo energético con una serie de medidas muy en consonancia con el POE de la BRGF que se describe en este artículo. Dentro de este plan, la UPC pretende llevar a cabo pruebas piloto con incentivación económica en 13 edificios de la universidad. En estos momentos, el ejemplo más claro de lo que se puede conseguir por esta vía es el Campus de Terrassa, que cuenta con tres de sus edificios —uno de ellos es la biblioteca— dentro de este proyecto de optimización de la energía y que se propone el objetivo de ahorrar un 15 % en su consumo global —de hecho en los últimos meses, durante agosto y septiembre de 2011, ya había conseguido reducir unos 12.000 € de su factura eléctrica—. Creemos, pues, que la programación de actuaciones en esta línea tiene bastantes posibilidades de crecer en nuestra universidad y que esto puede representar cantidades muy significativas de ahorro energético a medio plazo.
En cuanto al sistema bibliotecario de la UPC, el caso de éxito de la BRGF ha sido difundido entre el resto de bibliotecas que, sin excepciones, han mostrado una voluntad muy favorable para emprender acciones en la misma línea. En el momento en el cual se redacta este artículo (noviembre de 2011), el Servicio de Bibliotecas y Documentación de la UPC está elaborando su plan estratégico para los próximos años y hay una clara voluntad de que el ahorro energético sea uno de los objetivos de esta nueva planificación estratégica.
A pesar de que la estructura del sistema bibliotecario UPC es muy variada, con bibliotecas de muy distintas dimensiones, ubicadas en diferentes tipos de edificio y con sistemas de gestión de la energía también muy diferentes, la intención es adaptar las medidas del POE de la BRGF —y otras que puedan surgir— a las diversas realidades del resto de bibliotecas. Si se consigue, el POE de la BRGF habrá servido de prueba piloto para el resto de bibliotecas, de forma que los ahorros de éstas se generen más rápidamente, multiplicando los beneficios por el número de participantes y obteniendo niveles significativos de ahorro a corto-medio plazo; convirtiendo las bibliotecas de la UPC en pioneras de una actitud proactiva para mejorar las actuales condiciones de crisis económica y medioambiental, sin detrimento de los servicios a los usuarios.
5 Conclusiones
Aun ofreciendo más metros cuadrados a climatizar e iluminar durante más horas de apertura, con más afluencia de usuarios y con un mayor confort según los resultados de las encuestas a los estudiantes, desde que se puso en marcha su plan interno de ahorro energético (POE), la BRGF ha conseguido ahorrar más de 31.000 ? en 18 meses respecto al gasto eléctrico de los últimos años (v. Figura 3). De esta cifra, más de 18.000 € han sido ahorrados en sólo los últimos 6 meses —con algunas acciones ya consolidadas—, lo cual permite esperar que a corto plazo, cuando la totalidad de las acciones hayan podido ser llevadas a cabo, el valor actual del ahorro, que supera el 33 %, se vea todavía más aumentado.
Figura 4. Resumen del ahorro energético
Estos resultados se han conseguido con una serie de medidas que de entrada tenían las limitaciones de no implicar inversión económica —sólo la instalación de sensores y de láminas de protección solar, así como la plantada de árboles, han supuesto un gasto directo— y no empeorar el servicio a los usuarios finales de la biblioteca. Con el POE ya dando frutos cuantificables en ahorro de kWh y dinero, se puede afirmar que estas condiciones se han respetado y que se ha hecho a través de unas actuaciones de más o menos envergadura y efectividad pero en todo caso sólo posibles por la acción colaborativa de los distintos agentes de la universidad que podían tener incidencia en el objetivo propuesto.
Aprovechando la planificación estratégica que le es propia, el Servicio de Bibliotecas y Documentación de la UPC tiene la clara voluntad de extender esta experiencia comenzada en la BRGF al máximo de bibliotecas posibles de la universidad. En el actual entorno de crisis económica y medioambiental, este tipo de iniciativas parecen más necesarias que nunca y las bibliotecas tienen una nueva oportunidad para convertirse en el ejemplo de participación y liderazgo en un ámbito de enorme alcance económico y social.
Bibliografía
Ruiz, Galdric (2010). "Bases per a la recerca en reducció d'emissions de CO2 en edificació des de la perspectiva dels edificis vius". <http://upcommons.upc.edu/pfc/handle/2099.1/9951>. [Consulta: 16/10/2011].
Universitat Politècnica de Catalunya Barcelona Tech. Centre per a la Sostenibilitat. "Presentació". Sirena. Sistema d'Informació de Recursos Energètics i Aigua. <http://www.upc.edu/sirena/>. [Consulta: 16/10/2011].
Universitat Politècnica de Catalunya Barcelona Tech. Institut de Sostenibilitat (2010). Informe SIRENA 09. <http://www.sirena-edifici.net/memoria/Informe_SIRENA09.pdf>. [Consulta: 16/10/2011].
Universitat Politècnica de Catalunya Barcelona Tech. Institut de Sostenibilitat (2011). Informe SIRENA 10. <http://is.upc.edu/publicacions/informes/informe-sirena-2010-1>. [Consulta: 16/10/2011].
Universitat Politècnica de Catalunya Barcelona Tech. Oficina de Mitjans de Comunicació (2011). Mesures d'estalvi energètic. <http://www.upc.edu/saladepremsa/pdi-pas/reduir-la-factura-energetica/Mesures-destalvi-energetic.pdf>. [Consulta: 16/10/2011].
Universitat Politècnica de Catalunya Barcelona Tech (2011). Pla d'estalvi energètic. <http://www.upc.edu/comunitat/pdi-pas/pla-estalvi-energetic/>. [Consulta: 16/10/2011].
Fecha de recepción: 02/11/2011. Fecha de aceptación: 07/11/2011.
Notas
1 La instalación de detectores de presencia es una medida de ahorro efectiva en muchas zonas de edificios con multitud de usos como las bibliotecas y, en general, en los espacios que tienen usos puntuales como pueden ser ascensores, lavabos, etc.
2 A finales de septiembre de 2010 no se hicieron lecturas y los consumos de estos días se acumularon en el mes siguiente. Para dar unos valores lo más reales posibles, los valores de la gráfica para los meses de septiembre y octubre de 2010 son la media de las lecturas de estos meses.
3 Se pueden conocer más detalles consultando Ruiz (2010), tesina de final de máster de Galdric Ruiz, uno de los responsables del proyecto.
4 Se entiende por consumo de fondo el consumo eléctrico cuando los espacios están cerrados -luces de emergencia, servidores y otros aparatos que tienen que permanecer conectados, etc. -. Este consumo se puede minimizar pero no puede llegar a ser nulo.
5 Se estima que más o menos el 10 % del consumo en los hogares proviene de los aparatos electrónicos en stand by. Este gasto por aparatos en stand by es un tema cada vez más tratado por las agencias dedicadas a la gestión energética como la International Energy Agency -v. p. ej.: <http://www.iea.org/subjectqueries/standby.asp>-.
6 Se entiende por temperatura de consigna la temperatura que se pide a un sistema de climatización. La UPC ha aprobado como medida de ahorro energético que la temperatura de consigna para los equipos de climatización para espacios interiores tiene que ser de un mínimo de 26 ºC en verano y de un máximo de 20ºC en invierno, cumpliendo así lo que regula el Reglamento de las Instalaciones Técnicas de Edificios (RITE).